Saludos a todos, damas y caballeros.
Noviembre es un mes bastante desapacible por lo general, con mal tiempo y días cortos, pero sin el alivio de la Navidad. Para ahorrarnos ese dolor ya están El Corte Inglés y similares, que por lo que veo cada vez comienzan antes la campaña navideña. Es la paradoja del mundo en que vivimos, tenemos a la reina hablando de bioeconomía, sea eso lo que sea, y tirar el consumo a la mierda y a las cadenas de distribución adelantando hasta límites insospechados las campañas para favorecer el consumismo. Para ahondar en la locura, este año he hecho el terrible descubrimiento de que hay españoles celebrando el Thanksgiving (sin siquiera dignarse a llamarlo "Día de Acción de Gracias"). Sospecho que yo siempre he sido demasiado medieval para este mundo, pero cada vez estoy más desorientado.
En fin. Gilipolleces variadas al margen, noviembre es normalmente un mes en el que me encuentro bastante apático, pero este mes eso no se ha llevado al ámbito de la pintura, en el que he estado más activo de lo que esperaba. Supongo que es mi último intento "desesperado" por terminar los objetivos que me propuse de una forma digna. Esto tiene un mérito adicional en el mes en que he descubierto el Atila Total War, que me permite jugar en el que es el momento histórico que más atractivo me resulta junto con el Renacimiento, la caída del Imperio romano. Con lo que supongo que podría haber pintado incluso más, aunque habría sido a costa de no haber podido revivir la epopeya de los visigodos y el reino de Tolosa.