Saludos a todos, damas y caballeros.
Me gusta el mes de septiembre en Almería, cuando ya no hace el tremendo calor de agosto pero sigue siendo un clima cálido, la playa está en una temperatura agradable y comparativamente vacía y todavía no han llegado los vientos endiablados que suele haber en otoño y primavera. Es un mes ideal. Desafortunadamente para mí, el mismísimo 1 de septiembre tuve que volver a Madrid, que desde mi perspectiva no es tan ideal... no es que tenga nada en contra de la capital del reino, es una ciudad extraordinaria, solo que no es para mí.
Pero no hay mal que por bien no venga, y si algo ha traído el retorno a Madrid ha sido el retorno a los pinceles, que había dejado abandonados en julio y agosto. Por eso no hice entradas estos meses. La escalada de este año sigue mostrando que probablemente va a ser muy muy escasa, pero he cogido los pinceles con ciertas ganas después del parón y eso, unido a que lo que he pintado es más simple que el asa de un cubo, me ha permitido llegar a números razonables.