Saludos a todos, damas y caballeros.
Ya avancé en la entrada de la escalada que había pintado unas cuantas cosas para poder usarlas en la última misión de Exploradores de las Profundidades Sombrías adaptado al mundo de los Elder Scrolls. La campaña ha dado mucho de sí puesto que comenzó en 2020, en plena pandemia, y lo cierto es que el mundo ni yo somos iguales ahora que entonces. Es una sensación un poco extraña pensar en algo que haya mantenido cierta continuidad en un contexto en que casi todo ha cambiado. Pero ya tengo ganas de terminarla, como he hecho con tantas campañas a lo largo del año, y a ello me he puesto.
La partida anterior de este escenario, que podéis encontrar aquí, representaba el descenso hacia lo que en el juego original son las profundidades sombrías y que en este caso podemos considerar que es Puerto Gélido, el reino del daedra Molag Bal. Este segundo escenario representa el fin del camino seguido previamente y la entrada en el reino daédrico propiamente dicha.