Escalada: noviembre 2024

Saludos a todos, damas y caballeros.

San Ignacio de Loyola dijo que, en tiempos de desolación, no hay que hacer mudanza. Es un consejo sabio, porque el fundador de los jesuitas fue un hombre sabio (cosa que no se puede decir de todos los que le han seguido, ejem) pero quizá incompleto. Yo creo que, si San Ignacio de Loyola hubiera vivido en el siglo XXI, su frase habría sido algo como: "en tiempos de desolación, no hay que hacer mudanza; en cambio, pintar goblins como si no hubiera un mañana puede ayudar bastante".

Decir que estoy en tiempos de desolación sería exagerar bastante, además de resultar injusto en comparación con quienes realmente viven momentos así. Pero sí es cierto que no echaré mucho de menos este 2024, particularmente los últimos meses. No estoy en donde quiero estar, pero lo que debe hacer todo hombre de bien que se encuentre en un sitio que le es incómodo es tratar de moverse hacia donde quiere estar y buscar todos los apoyos que pueda por el camino. Pintar goblins puede estar muy abajo en la lista de apoyos, pero esto no es un blog de autoayuda ni yo soy Paulo Coelho, a Dios gracias. Aquí hablamos de moñecos... y oye, los moñecos también ayudan.

A estas alturas debería llevar pintado el 83,3% de los objetivos, objetivos que, dicho sea de paso, he cambiado bastante sobre la marcha a lo largo del año. Pero pese a todo la cosa va viento en popa:

• Perdidos y Condenados (18/24): 75%. Este se va a quedar en números rojos y no es algo que me perturbe, en realidad tengo ya muchos como para jugar con ellos y dedicarles más tiempo quizá no sea del todo necesario habiendo otras cosas que requieren mi atención. 

• Proyecto Imperio (24/24): 100%. Ya he visto que GW va a volver a sacar las cajas de caballeros y milicia en lo que va a suponerme un agujero financiero de primera magnitud. Si me detienen por traficar droga en el Poniente, ya sabéis cuáles han sido mis motivos. Pero eso será para el año que viene, de momento tengo un mes de tregua en que puedo mantener la ficción de que soy un ser humano equilibrado y capaz de vivir en sociedad.

• Tierras del Sur: Fortaleza de los Condenados (26/25): 104%. No han caído jinetes pero sí este maravilloso individuo, al que he comprado por dos motivos: primero, necesitaba un tipo con arma a dos manos para representar a mi general en esta partida, y segundo, he visto que los auténticos cafres de Avatars of War se han ido al STL en exclusiva y han abandonado su producción de minis físicas... lo que es una aberración indudable, porque tenían algunas cojonudas. Así que he tenido que comprar a este colega antes de que desaparezca de la faz de la tierra. Lamentable.

• Armageddon: Clan Luna Malvada (87/85): 102,4%. Quería haber pintado vehículos pero la verdad es que son demasiado tochos y me dan cierta pereza, para el año que viene se van.

• Historia alternativa (13/24): 54,2%. Tenía pensado meterme en un nuevo proyecto en noviembre pero no iba a darme tiempo. Quizá lo haga el próximo noviembre (es relativamente importante que sea en este mes, como se verá el año en que me decida a hacerlo).

• Proyecto otoñal: goblins (30/36): 83,3%. Efectivamente, casi todo el mes se ha ido en pintar goblins, que es una tarea siempre grata y más cuando se pintan con un cierto aire clasicorro. Estos veinte socios verdes se unen a los diez que había pintado el mes pasado, y por tanto para los primeros 500 puntos otoñales de goblins me quedan solo dos fanáticos, un chamán y tres tristes trolls, que veremos el mes que viene Dios mediante.

• Reinos Olvidados (5/12): 41,6%. Nada por aquí porque ya saqué casi todos los objetivos fuera, y he dejado éste un poco descolgado. Dado que es un cajón de sastre, no me importa mucho.

• El Refugio del Cuervo (14/14): 100%. Pinto dos dremora adicionales, con lo que debería poder jugar el último escenario de la campaña tranquilamente, pero luego me di cuenta de que no es así y que tendré que pintar más cosas. Bueno, si me animo será antes de que termine el año, si no, esta campaña seguirá en 2025 aunque sea en su fase final.

• Séquito inquisitorial (7/7): 100%. Proyecto terminado y cerrado.

• Infinity (12/0): un Caballero de Justicia y un Caballero de Santiago hacker que he usado en el 100% de las partidas que he jugado con Órdenes Militares y que ya tenía que dejar de proxear. El Justicia está un poco oscuro para los estándares a medio camino entre el cyberpunk y el solarpunk de Infinity, pero creo que el magenta de la capa lo redime un poco y le permite encajar en esta estética.

Todo esto hace un total de 25 miniaturas, lo que de nuevo me pone en casi una al día, un ritmo que no ha bajado en todo el año y del que estoy muy orgulloso. Con esto hago ya 235 miniaturas en el año sobre un total de 251 previstas, por lo que me pongo en el 93,6%, en números verdes con solvencia. Lo gracioso es que, de las 25 miniaturas pintadas, 24 pertenecen a cosas que no había previsto al comienzo del año, lo que dice muy poco de mis capacidades de predicción y organización... pero bueno, dado que hablamos de moñecos, tampoco vamos a martirizarnos por ello. Aquí lo importante es pintar, más que cumplir un plan que solo me afecta a mí. 

Otra vez bonus

Hace unos días tuve "la charla" con mi hijo mayor, charla que naturalmente no va de sexo, sino de cuál es su capítulo preferido de marines espaciales. El niño tiene alma de mecánico y por tanto su elección inevitable han sido los Manos de Hierro. Con una caja de esas de pintura que te vienen tres primaris para guarrear, estamos en progreso hacia su primera miniatura pintada siguiendo un esquema.

Mano de hierro con un emblema de Ultramarines pero bueno

Edito: aquí está la versión final de la mini. La verdad es que pinta, no ya mejor que yo a su edad, sino casi mejor que yo a la mía. No sé si esto será o no el comienzo de una gran afición, pero al menos sí es una grata memoria que perdurará.

No podía dejar fuera al pequeño, al que con sus tiernos cinco años le gustaron los Cicatrices Blancas porque la mini que le enseñé (Kor´Sarro Khan) "tiene un pajarito". Aquí un primaris ha dado su vida, no por el EMPRAH, sino por tiempo de calidad padre/hijos, que es mucho más importante. También tienen razón mis colegas en que podría no haberle dado imprimación negra, pero cuanto antes aprenda que la vida es dura, mejor.

Ha querido guardarlo en la balda de las minis pintadas y no lo pienso quitar de ahí en mi puta vida

En lo que respecta a las demás cuestiones frikis, otra vez el mes ha dado poco de sí:

• He escrito un relato sobre la campaña de Froster Scrolls, que podéis ver aquí.
• He jugado dos partidas, la de Froster Scrolls que podéis ver aquí y la de las Tierras del Sur, que está aquí.

Y por último, en lo que se refiere al bingo más grande del universo:

Retos de pintura

• Diezmo de reclutamiento: con 20 goblins que se unen a los 10 que pinté el mes pasado para hacer una unidad de treinta.
• Te reviento: las intenciones del tipo de Avatars of War son completamente inequívocas. Si hay una miniatura que merece dar nombre al reto, es esa sin duda.

Retos de juego

• Estamos aquí por la historia: con el relato enlazado.

Y esto ha sido noviembre. Tal como estaba claro que sucedería, ya es el año que más he pintado desde 2021, cuya marca no volveré a igualar, pero dejo muy atrás al resto de años. Ahora en diciembre quiero terminar lo de los goblins y quizá también las Órdenes Militares de Infinity, y con eso será un año espectacular en términos de pintura.

¡Que se dé bien diciembre y el fin de año!