domingo, 8 de enero de 2023

Muerte en el Bosque: la batalla final

Saludos a todos, damas y caballeros.

En 2021 nos propusimos Fornidson, Sedeño y yo una campaña/escalada, Muerte en el Bosque, en la que yo pintaría elfos oscuros, Sedeño pintaría elfos silvanos y Fornidson pintaría hombres bestia. Sé que desde 2021 han pasado ya dos años, y aunque al principio fuimos capaces, más o menos, de mantener el ritmo trimestral, tuvimos que darlo por imposible. No obstante, esto no quiere decir que abandonáramos la campaña, simplemente que la posponíamos hasta que pudiéramos terminarla... y ese momento ha llegado.

Lo que sí hemos hecho ha sido acortarla, pues, así como jugamos la partida correspondiente al primer trimestre (que podéis ver aquí) y al segundo trimestre (que podéis ver aquí y aquí), la del tercer trimestre nos la hemos saltado, pasando directamente a la batalla final del cuarto trimestre. Ello se debe a que, aunque en la escalada solo participábamos tres, la idea original era que nuestro colega Jaime hubiera sido la cuarta pata de la mesa con altos elfos. Jaime se cayó de la escalada, pero contábamos con su presencia en la batalla final, para hacer una auténtica partida 4000 vs 4000 puntos, y aprovechando su presencia el día que por fin pudimos quedar, decidimos ponernos directamente en la batalla final de la campaña.

La campaña la librábamos con reglas de sexta edición (tenemos pendiente iniciar a Jaime en los senderos de Reforged), motivo por el cual fue bastante larga. De hecho, tuvimos la suerte de poder pararla y quedar diez días después para terminarla, porque en el primer día solo habíamos llegado hasta el turno 3. También por ello tomé demasiadas pocas fotos como para hacer un informe de batalla en condiciones, así que lo que voy a hacer es una descripción rápida de lo que sucedió. Hay que decir que fue una partida de las buenas, de las que realmente crean afición, primero por lo espectacular de la misma, segunda por los momentos de heroísmo desaforado e incompetencia máxima que se vivieron, y tercero porque, aunque finalmente el resultado fue muy claro, la batalla tuvo tensión hasta el final.

Como escenario, decidimos hacer una batalla campal, pero utilizando los objetivos aleatorios que fueron publicados en Cargad y desarrollados por el Archivero de GW para darle gracia al tema. Los objetivos que nos tocaron fueron:

  • Altos elfos: asesinar al general elfo oscuro (primario), intentar terminar la batalla con el 75% de la potencia de unidad del ejército habiendo sobrevivido (secundario).
  • Elfos silvanos: asesinar a la miniatura más valiosa del ejército enemigo, concretamente el escuerzo alado (primario), no entrar en combate cuerpo a cuerpo hasta el turno cuatro (secundario)
  • Elfos oscuros: asesinar al general alto elfo con su general (primario), no entrar en combate cuerpo a cuerpo hasta el turno cuatro (secundario)
  • Hombres bestia: asesinar al general elfo silvano (primario), asesinar a la hechicera elfa silvana (primario).

Unos objetivos bastante directos y bastante narrativos la verdad, muy molones. En cuanto a las listas de ejército, las pongo por encima para no alargar esto demasiado, recordando que es de sexta edición: Fornidson sí recurrió a los Manuscritos de Nuth para un par de unidades, pero los tres ejércitos elfos estaban hechos con reglas puras de sexta.

  • Altos elfos: archimago de nivel 4 (alta magia), mago de nivel 2 (alta magia), 2 unidades de 5 yelmos plateados, 20 lanceros, 2 carros de Tiranoc, 20 maestros de la espada, 4 lanzavirotes de repetición.
  • Elfos silvanos: biennacido, maga de nivel 2 (saber de Athel Loren), noble estirpe de los bailarines guerreros, 2 unidades de 10 guardias del bosque, 5 jinetes del bosque, 12 dríades, 8 bailarines guerreros, 3 jinetes de halcón, 5 jinetes de Kurnous, águila gigante, hombre árbol.
  • Elfos oscuros: príncipe elfo oscuro, noble portaestandarte de batalla, hechicera de nivel 2 (magia oscura), noble en pegaso, 20 lanceros, 20 corsarios, 10 ballesteros, 5 jinetes oscuros, carro de gélidos, 20 guardias negros, 2 lanzavirotes de repetición.
  • Hombres bestia: caudillo hombre bestia, 2 chamanes de nivel 2 (uno con saber de la muerte y otro de las bestias), 3 rebaños de 12 gors y 8 ungor (2 de ellos emboscando), 17 bestigors, 2 carros, 2 unidades de 5 mastines, 3 garragors, escuerzo alado, 5 furias, engendro.
Panorámica del despliegue

En cuanto al desarrollo de la batalla, vino marcado por dos cuestiones: en primer lugar, como podéis ver en la imagen, que ampliamos la mesa hasta los 2,40 metros, con lo que había espacio en los flancos para maniobrar; en segundo lugar, como podéis ver el centro estaba bastante poblado de escenografía, entre lagos y bosques. En consecuencia, en los primeros compases de la batalla ésta se centró en los flancos, y solo a partir del turno 3 comenzó a haber combates en el centro.

Comenzamos con el flanco izquierdo de la alianza malvada, del que no hay una puñetera foto, así que os tendréis que fiar de la tradición oral. En este flanco se enfrentaron un carro de gélidos, otro de tuskgors y las furias contra una unidad de yelmos plateados, un carro de Tiranoc y un lanzavirotes. La cosa se complicó cuando el carro de gélidos falló su chequeo de estupidez (fallaría varios a lo largo de la partida), dejándolo a distancia de carga tanto del carro de Tiranoc como de los yelmos plateados. No obstante, en compensación, solo los yelmos superaron el chequeo de miedo, y sin el apoyo del carro no fueron capaces ni de destruir el carro elfo oscuro ni de hacerlo huir. Ello propició que después las furias cargaran contra los Yelmos y el carro de tuskgor contra el de Tiranoc, masacrando a ambos y ganando el flanco. Tras eso, el carro de tuskgor acabaría con el lanzavirotes que rondaba la zona y las furias se irían hacia el centro a tener un momento estelar del que hablaré después.

El desenlace de ese flanco

Si el flanco izquierdo fue ganado por los malvados, en el flanco derecho la cosa fue bastante diferente. Fornidson se vino muy arriba con el galimatazo, quizá confiando en que su aura de locura (que en la adaptación de MdN funciona como un lamento de doncella espectral con radio de 30 cm) y el terror serían suficientes como para que la posición élfica se desmoronara.

Ese karro orco infiltrado representa al segundo carro de Tiranoc, del que Jaime se olvidó...

No obstante, los elfos no solo mantuvieron el tipo y no huyeron, sino que le echaron bastante valor y se enfrentaron al galimatazo con tropas ligeras.

Véase cómo el carro, al darse cuenta de que está tripulado por orcos y que no pinta nada allí, huye en la lejanía...

En circunstancias normales, el galimatazo quizá podría haber ganado, pero Fornidson tuvo muy malas tiradas y al final los bonificadores estáticos de los elfos fueron suficientes como para hacer huir al bicho... que acabaría siendo asaeteado por el general de Sedeño, quien llevaba el Arco de Loren.


Esto, sumado al hecho de que la segunda unidad de Yelmos Plateados consiguió destrozar a los garragor que podéis ver en una foto por ahí arriba, determinó que la alianza del Bien acabara ganando el flanco derecho. Esa victoria fue más relevante que la que habíamos conseguido nosotros en nuestro flanco izquierdo, ya que no solo los puntos del galimatazo y los garragor eran más elevados sino que había permitido a Sedeño cumplir con su objetivo primario de acabar con la miniatura más cara del ejército enemigo, poniendo a la alianza del Bien en una posición muy ventajosa en términos de puntos de victoria.

Esto nos obligaba a ganar el centro, en un combate que se decidió por dos cuestiones principales: la primera, que los dos rebaños emboscados hicieron bastante poco daño y sirvieron de muy poca ayuda, más allá de distraer un poco a los elfos sin, como digo, ponerlos verdaderamente en un aprieto. La segunda, lo que podéis ver en esta foto:


Ese engendro estaba ahí para cubrir la aproximación del hombre árbol al flanco de mis corsarios. En su turno creo que 3, las dríades cargaron a los corsarios y el hombre árbol al engendro gracias a ser transportado con el hechizo de mover bosques que tenían los silvanos en sexta edición. Estadísticamente, el hombre árbol haría 2-3 heridas al engendro, y la estadística cayó del lado del 3, con lo que el hombre árbol arrasó y se trabó con mis corsarios, impidiendo que éstos persiguieran a las dríades a las que acababan de hacer huir. Al tiempo que pasaba esto, los bestigors estaban dándose de tortas contra los lanceros altos elfos...


A los que ganaron, así como mis lanceros ganaron a unos bailarines guerreros, haciéndoles huir y atrapándolos en la persecución. El arrasamiento de los bestigors los llevaron a trabarse con el general elfo silvano, y parecía que habíamos conseguido romper el centro, pero el hecho de que los corsarios se hubieran quedado atrás permitió que la alianza del Bien pudiera frenar esta incursión.


Al final, la unidad de bestigors fue rodeada por los Yelmos plateados que anteriormente habían ganado a los garragors, quienes les atraparon por la retaguardia, y los jinetes de Kurnous. Tras dos rondas de combate, solo sobrevivió el caudillo, quien fue perseguido y atrapado.


La batalla estaba prácticamente perdida, pero en el último momento Fornidson hizo una de sus jugadas mágicas, cargando con las dos furias que quedaban vivas contra el general elfo silvano...


Y, tras una ronda de combate absolutamente desastrosa, el general elfo perdió la resolución por 1 (más potencia de unidad de las furias) y, dado que éstas causaban miedo, huyó automáticamente, siendo perseguido y atrapado. Eso permitió ganar un buen puñado de puntos de victoria en el último suspiro, pues a los puntos que valía el comandante había que sumar los 100 de matar al general y los 500 de cumplir el objetivo primario por parte de los hombres bestia.

No obstante, al final se hizo evidente que la alianza del Bien había obtenido una victoria bastante contundente, y esta última actuación de las furias quizá había servido para, como mucho, evitar la masacre. Los elfos del Bien se habían defendido de manera extraordinaria, habían sido capaces de minimizar sus debilidades y potenciar sus fortalezas y habían jugado inteligentemente para seleccionar sus combates, ayudados por su mayor maniobrabilidad... y por el maldito hombre árbol, a quien declaro desde hoy mi odio eterno. Y eso, viniendo de un druchii, es mucho decir.

No vuelvo a Loren en mi puta vida

En cualquier caso me alegra haber conseguido terminar esta campaña, aunque sea dos años después y restando una partida. Pronto haremos un relato de cierre, para poder ponerle el sello de finalizado de forma oficial (si no hay Trasfondo concluyente esto no vale). En todo caso, si os habéis quedado con ganas de más elfos silvanos, es probable que aparezcan mucho más en el blog a lo largo de 2023... os vais a hartar de ver hippies abrazaárboles ecoterroristas.

¡Hasta entonces!

2 comentarios:

  1. Me reservo el comentario hasta el relato. Que será positivo.
    Solo he entrado a escribir por lo que me he reído con No vuelvo a Lorien en la puta vida!
    Me alegro que hayáis acabado la campaña. Un saludo

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    1. ¡Muchas gracias! Confío en traer el relato pronto, efectivamente. En cuanto a lo de volver a Loren... me he divertido viendo la campaña a través de los ojos de mi general, que es un corsario y por tanto un marinero, metido en lo profundo de un bosque bien frondoso. Cuando de pronto uno de esos árboles, que por poder y mala leche bien podría ser el Roblón (guiño guiño), empieza a andar y a darte de palos... me lo imagino con cara de "venga hombre, esto es de broma" y echando a correr hacia el mar como alma que lleva el diablo.

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