[Informe de batalla] Muerte en el Bosque: los monolitos oscuros de Modryn (I)

Saludos a todos, damas y caballeros.

La campaña/escalada de Muerte en el Bosque sigue adelante. Lentamente, como sucedió el año pasado, pero sigue adelante. Tras jugar hace unos meses la partida correspondiente al primer trimestre, y que podéis ver aquí, Fornidson, Sede y yo jugamos hace poco la partida del segundo trimestre, que es lo que os traigo hoy.

El escenario que jugamos fue colgado en esta entrada. La idea era, de nuevo, hacer una batalla de ocupar una posición, pero habiendo varias posiciones a ocupar y determinando aleatoriamente cuál debía ser ocupada por cada ejército. La verdad es que quedó una partida bastante interesante, y pese a jugar a solo 1000 puntos no echamos para nada de menos la emoción que puede haber en partidas de mayor tamaño. También hay que decir que esta partida rompió parcialmente una de las reglas de la campaña/escalada, que es jugar con todo pintado, pues los bestigor de Fornidson estaban sin terminar. Pero, para no esperar más, lo dejamos pasar.

Al ser una batalla de tres bandos, me queda un informe de batalla muy largo, por lo que lo voy a separar en dos entradas. Os dejo con la primera parte. Espero que os guste.

Para la partida, los hombres bestia se presentaron con lo siguiente:

• Rakranos Rugido Sangriento: Beligor con cuerno de la gran cacería, armadura pesada y arma a dos manos
• Bezghar Mirada Torcida: Chamán nivel 2 con diente ensangrentado y pergamino. Obtuvo los hechizos viento de muerte y furia del oso (por el diente ensangrentado)
• 14 bestigors con grupo de mando
• 12 gors con escudos, 8 ungors con lanza, grupo de mando
• 12 gors con dos armas de mano, 8 ungors con lanza, grupo de mando
• Carro
• Carro
• 5 mastines
• 5 mastines

Despliegue de los astados

Mientras que los elfos silvanos trajeron esto:

• Arcadia: espectro de árboles de nivel 1, molestos geniecillos. Obtuvo el hechizo el cántico de los árboles
• Aelvinith: cantora de árboles de nivel 2. Obtuvo los hechizos el cántico de los árboles y la llamada de la cacería
• 10 Guardias del bosque 
• 10 Guardias del bosque
• 9 Dríades con campeón
• 6 Jinetes del bosque con campeón
• 5 Jinetes de Kurnous con grupo de mando completo
• 1 Águila gigante

Despliegue elfo silvano

Y mis druchii tenían la siguiente lista:

• Gorwen, la Dama del Terror: hechicera de nivel 2 con el libro de Furion, cristal de medianoche. Obtuvo los hechizos Nagaelythe, el viento gélido; rayo de Kharaidon; y palabra de dolor de Chroesh 
• Urian Darksword: Noble portaestandarte de batalla, armadura sangrienta, espada de poder 
• 19 corsarios, grupo de mando completo 
• 20 guerreros elfos oscuros con lanzas, escudos y grupo de mando completo 
• Carro de gélidos 
• 2 lanzavirotes

Despliegue elfo oscuro

Tiramos los dados y salió que primero jugarían los silvanos, luego los hombres bestia, y luego los druchii. A los elfos silvanos y a mí nos tocó ocupar el mismo monolito, el que estaba frente al despliegue de los silvanos, mientras que a los hombres bestia les tocó el que estaba a su izquierda (su derecha desde la perspectiva de los elfos silvanos)

Turno 1 elfos silvanos

Los asrai comenzaron moviéndose en su flanco derecho para obtener una buena posición de tiro frente a los hombres bestia, mientras que no hubo grandes movimientos contra mí. Es lógico, Sede sabía que mis druchii son marineros, no bosquímanos, mientras que los astados le iban a poner en mayores aprietos.

Los habitantes de la Cañada Oscura se movilizan

Tras mover algún busque en la fase de magia con el que entorpecer aún más mi movimiento, Sede disparó sobre los perros de los hombres bestia, matando a dos y haciéndoles fallar el chequeo de pánico.

Los mastines huyen atravesando a la unidad de bestigors

Turno 1 hombres bestia

Los mastines se reagruparon, y el ejército avanzó hacia el monolito que tenía que controlar, que casualmente estaba atravesando a los elfos silvanos... cosas que pasan.

Sin disparo y sin magia, pues el chamán estaba en uno de los dos rebaños emboscados, Fornidson me cedió el turno.

Turno 1 elfos oscuros

Yo avancé también, intentando no obstruir demasiado mis líneas de tiro y metiendo a mis lanceros en un bosque. No tardaría demasiado en arrepentirme...

En la fase de magia, Gorwen usó todo su poder para machacar a esos mastines que se acercaban a mi zona y que no me gustaban mucho. El Rayo de Kharaidon no estaba a distancia, pero el viento gélido acabó con tres mastines. No fallaron el pánico pero en la siguiente ronda de disparo el lanzavirotes mató a los que quedaban, quitándome un problema de encima.

El lanzavirotes del otro flanco disparó contra los arqueros silvanos, matando solo a uno.

Turno 2 elfos silvanos

Los elfos silvanos se siguieron posicionando para recibir el inminente ataque de los hombres bestia, pero lo importante es lo que sucedió en la fase de magia. Sede vio que tenía una unidad de elfos oscuros en un bosque y dos hechiceras con el cántico de los árboles. Y pasó lo que tenía que pasar...

Bueno, pasó más de lo que tenía que pasar, porque, lanzado dos veces, el máximo de bajas que podía sufrir era 12 y Sede me causó once... eran unos árboles particularmente furiosos. Pero también es culpa mía por meterme en un bosque. En Athel Loren. Bien.

Por suerte, los arqueros posteriormente solo mataron un corsario.

Turno 2 hombres bestia

Los bestigor cargaron a los jinetes del bosque, quienes lógicamente huyeron. Lo relevante, en cualquier caso, fue que las dos emboscadas funcionaron adecuadamente, saliendo un rebaño con dos armas de mano en mi retaguardia y el que tenía arma de mano y escudo (y el chamán) en la retaguardia de los silvanos.

Malditas cabras 1

Malditas cabras 2

El chamán no consiguió lanzar ningún hechizo y no había disparo, con lo que Fornidson seguía sin causar daño, pero nos acababa de meter a ambos ejércitos élficos en un problema serio...

Turno 2 elfos oscuros

Mi carro decidió que era buen momento para fallar el chequeo de estupidez, algo que haría varias veces a lo largo de la partida en momentos mucho más cruciales. No importaba mucho: lo que tenía que hacer era quitarme a esos hombres bestia malajes de encima. Moví para alejarme todo lo que pude de las cabras (y para sacar a los lanceros del bosque) y me preparé para unas fases de magia y disparo que debían ser decisivas.

Mis druchii poniendo toda la distancia posible entre ellos y esas jodidas cabras

En la fase de magia, Fornidson consiguió dispersar el rayo de Kharaidon, pero el viento gélido entró y mató a tres ungor. Era insuficiente para causar pánico, pero iba bajando los números.

Después llegó la hora de la matanza: Fornidson debería habérselo pensado mejor a la hora de aparecer entre el fuego cruzado de dos lanzavirotes de repetición. Confiaba en que ser hostigadores le salvaría, y lo hizo, pero no evitó que cada lanzavirotes causara tres bajas, para un total de seis, matando a todos los ungor y a uno de los gor.

Consecuentemente, los hombres bestia huyeron por pánico, pero no teníamos claro de cuál de los dos lanzavirotes debían huir, pues ambos habían causado igual número de bajas... tiramos un dado y salió que huían del que tenían más cerca, por tanto sin salirse de la mesa, pero bien jodidos en todo caso.

Cabras huyendo

Turno 3 elfos silvanos

Sede decidió lidiar con las cabras de manera más íntima y personal: los jinetes de Kurnous cargaron contra los bestigor, y las dríades hicieron lo propio contra el rebaño que acababa de aparecer a su espalda. Por su parte, los jinetes del bosque se reagruparon.

Carga 1

Carga 2

La fase de magia fue bastante más calmada, moviendo algún que otro bosque para fastidiar, pero poco más. Fue en la fase de disparo donde los asrai se lucieron, como les corresponde.

Entre guardias del bosque y jinetes de ídem dejaron a uno de los carros de tuskgor temblando, con una herida y de chiripa. 

Al menos morirá al lado de un lago precioso

Por si eso fuera poco, los nueve guardias del bosque que estaban frente a mis corsarios consiguieron matar nada menos que a cuatro de ellos. No me hicieron chequear pánico de milagro.

Lamentablemente para él, el combate cuerpo a cuerpo ya fue otra historia. Los jinetes de Kurnous no fueron capaces de romper a los bestigor, y huyeron (mataron a dos bestigor y perdieron al jefe de unidad en desafío con el beligor), mientras que las dríades tampoco fueron capaces de superar al rebaño, aunque en este caso se mantuvieron en su puesto.

Turno 3 hombres bestia

Los bestigor cargaron contra los jinetes de Kurnous, quienes tenían que reaccionar huyendo y abandonaron la mesa, y redirigieron la carga contra el flanco de los arqueros. No obstante, decidió acompañar esa carga con el carro, dando oportunidad a que los arqueros lo remataran con aguantar y disparar. Fornidson se olvidó de que solo le quedaba una herida...

Por su parte, el rebaño que estaba en mi retaguardia no se reagrupó, por lo que se salió de la mesa. Eso era un enorme alivio. No lo fue para Sede que el chamán trabado con sus dríades lanzara la furia del oso y se convirtiera en una máquina de matar, pero bueno...

Los combates le salieron bien a Fornidson, cosa poco complicada porque estaba en gran ventaja. Los bestigor hicieron huir a los guardias del bosque y el rebaño hizo también huir a las dríades, aunque en ambos casos los elfos demostraron ser más rápidos y no fueron atrapados.

Turno 3 elfos oscuros

Avancé con todo lo que tenía intentando llegar al monolito de una puñetera vez, y me dediqué a intentar dañar a lo que quedara en mi camino... especialmente a los bestigor, que eran lo más bruto que había en la mesa tras la huida de los jinetes de Kurnous.

Para ello, primero lancé el viento gélido sobre los guardias del bosque que estaban huyendo. Con ello conseguí que uno de los lanzavirotes tuviera una línea de tiro suficientemente buena sobre los bestigor, y disparé un virote grande, impactando y ensartando a tres cabras en un delicioso pinchito de... de cabrón.

Faltan dos elfos y hay tres bestigor muertos respecto a la foto anterior

Sin nada más que hacer, pasé el turno a Sede.

Vamos a dejar el informe de batalla aquí, al inicio del cuarto turno. La situación en ese momento se puede ver en esta foto:

Pronto publicaremos la segunda parte. Hasta entonces!