[Informe de batalla] Mordheim: la caza del mutante

Saludos a todos, damas y caballeros.

Hoy es martes, y aunque como dijimos ya hemos parado la serie de Martes de Mordheim, aún podemos seguir dedicando este día de la semana a ese maravilloso juego de GW. Concretamente, a la campaña Un Asunto de Contrabando, que estoy jugando con mi hermano estos días y del que ya os presenté el informe de batalla de la primera partida en esta entrada.

Anoche jugamos el segundo asalto, "La Caza del Mutante", jugando el escenario de GW "Bandidos en el Bosque". Es un escenario interesante en que la banda atacante, generalmente de los buenos, van a la caza de cafres genéricos, generalmente de los malos, estando ambos acompañados por una buena cantidad de mercenarios. En este caso cambiamos uno de los guardias de caminos de mi hermano por un explorador elfo, representando trasfóndicamente a un elfo del cercano bosque de Laurelorn (pues la acción se ambienta en Nordland) que quiere ayudar a acabar con los cultistas del Caos, y yo cambié el salteador de caminos por un corsario elfo oscuro, porque me hacía gracia tener un corsario en un culto encomendado a algún demonio de los mares.

En la partida anterior yo jugaba con unos piratas que acababan demostrando su naturaleza de cultistas. En este caso ya he usado una banda de poseídos como tal, el "Culto al Tiburón Primordial" (realmente era el "Culto al Rape Primordial", pero eso es una broma entre mi hermano y yo, para quien prefiera la versión oscura y siniestra del Mordheim original puede usar la versión del tiburón). Concretamente, mi banda incluía a (equipo según Retorno a Mordheim):

• Heinrich Von Kasper: magíster con daga, espada a dos manos, hechizo: palabra de dolor.
• El Elegido de los Mares: poseído con cola prensil, sangre ácida.
• Johannes Brock: mutante con daga, escudo, martillo, casquete de acero, horroroso.
• Wilhelm el Tarado: daga, espada, escudo, casquete de acero, piel férrea.
• Los hermanos de los bosques: dos hombres bestia con daga y hacha.

Además de esto, tenía como decía un hechicero (que obtuvo de hechizos del vuelo de bruja y suerte de Shemtek), un luchador del pozo y un corsario elfo oscuro (con daga, espada, armadura de cota de malla y capa de dragón marino)

Por su parte, la banda de mi hermano tenía a:

• Koos De La Rey: capitán con daga, espada ancha, pistola de duelo, casquete de acero, armadura de cota de malla
• Oom Krueger: campeón con daga, espada, rodela, pistola de duelo, casquete de acero, armadura pesada
• Barry Hertzog: recluta con daga, lanza de guerra, escudo, +1R
• Jan Smuts: recluta con daga, alabarda, casquete de acero, echarse a un lado
• Jan Viljoen y Schalk Burger: guerreros con daga, lanza, escudo, casquete de acero, armadura de cuero
• Christiaan de Wet y Louis Botha: tiradores con daga, ballesta
• Piet Joubert: espadachín con espada ancha, espada, casquete de acero

Además de un guardia de caminos, un cazarrecompensas (que eligió como objetivo a mi magíster, naturalmente), un explorador elfo y un aventurero. Su quinto héroe, un sacerdote de Sigmar, no pudo participar por una herida en el brazo sufrida en la partida anterior.

En cuanto a la partida, en este caso la cosa fue bastante rápida. Mi hermano organizó el despliegue de su banda en tres grupos, uno por cada flanco y otro en el centro. Yo hice un despliegue similar, aunque la particularidad de esta partida es que los cazados empiezan ocultos, y los cazadores deben descubrirlos.

Despliegue Marienburgo

Despliegue oculto de los Poseídos

Mi hermano avanzó hasta que el elfo descubrió al Magíster y al poseído (un hombre pes!!). En ese momento, yo decidí que ya era hora de revelarse y ataqué por mi flanco derecho, correspondiente a su izquierdo, cuyos hombres se habían separado un poco del grupo principal. Decidí atacar por ese lado porque ahí estaba el cazarrecompensas, a quien había que neutralizar para que no llegara hasta mi magíster.

Le juro que vi un hombre pes!!

Por su parte, el poseído/ hombre pes avanzó a solas, y se comió una buena ronda de disparos, pero por suerte para él tenía cobertura frente a los tiradores más peligrosos (los ballesteros) y logró salir indemne. Después de cargar a un lancero que se sacrificó por sus camaradas, recibió la carga del espadachín y de Oom Krueger. El espadachín le hizo una herida... Y ahí fue donde la sangre ácida hizo su magia, derribando a Oom Krueger y al lancero, y permitiendo que el poseído rematara tranquilamente al espadachín.

El combate en el flanco derecho no me fue tan bien: mi hermano tenía ahí mucha artillería en forma de cazarrecompensas y aventurero, apoyados por el recluta de la lanza y el otro guerrero, mientras que yo tenía a mi mutante que causaba miedo y a las dos cabras. La dureza de las cabras les permitió resistir, pero no hicieron nada y solo la mala suerte de mi hermano en las tiradas para rematar gente les permitió seguir con vida.

Paliza skinhead a una cabra

La batalla se decantó a mi favor cuando inicié el combate por mi flanco izquierdo, llegando con el corsario hasta Koos De La Rey y acabando con él. Esto, junto con el hecho de que el poseído remató a los dos marienburgueses que estaban derribados a sus pies, hizo que mi hermano tuviera que chequear retirada, fallando a la primera y largándose.

El corsario derrota a Koos De La Rey

La post partida no se le dio mal a mi hermano, de todos modos. Koos De La Rey obtuvo heridas múltiples, pero eso le sirvió para volverse endurecido (inmune al miedo) y apenas tuvo que lamentar que robaran su por otra parte caro equipo. Además se desarrolló, obteniendo +1R. Los secuaces caídos se recuperaron sin mayores problemas y se desarrollaron todos, obteniendo los guerreros  y el espadachín +1HA y los ballesteros +1HP. El único que tuvo problemas fue Oom Krueger, que sustituía al campeón muerto en la partida anterior y que no llegó a morir, pero que ahora es un poema: brazo amputado, estupidez, furia asesina y odio a los Poseídos. Además, obtuvo en la exploración dos tesoros y unos niños perdidos cuya recuperación sus padres recompensaron con cinco generosas coronas.

Por mi parte, el único que se desarrolló fue el Poseído, obteniendo una habilidad que casi seguro va a ser esquivar para tener salvación frente a esas ballestas tan molestas. Encontré cuatro tesoros y unos refugiados de Mordheim, que fueron convenientemente sacrificados al Tiburón Primordial por mi magíster, y por ganar la partida uno de los mercenarios que empleé se une a mi banda, que creo que va a ser el corsario. No es un espada de alquiler como tal, pero ya me inventaré alguna regla, me mola ese tío y creo que encaja con la temática marítima de la banda.

Pues esto es todo. Cuando juguemos la tercera y última partida de la minicampaña os traeré también informe, para cerrar adecuadamente la campaña. Hasta entonces, que se dé bien el vicio!!