Saludos a todos, damas y caballeros.
Os traigo la batalla con la que terminamos la campaña de "El Jardinero Fiel", que nos ha ocupado entre pitos y flautas la primera mitad del año. Creo que narrativamente ha sido la campaña más interesante de las que hemos echado Fornidson y yo, y ya van unas cuantas tras "Muerte en el Transtartárico", "Cruzada", "La Gran Evasión" y "Operación Shatranj". De esas cuatro, solo he ganado una, Cruzada, y el desenlace de ésta ha sido... llamativo.
Para esta última misión, Fornidson tenía que tomar una decisión ética, consistente en elegir entre hacer lo correcto y enfrentarse a la industria biofarmacéutica, con lo que ganaría determinados bonos pero tendría enfrente un Fiday, o hacer la vista gorda, con lo que ganaría puntos pero perdería determinadas reglas en sus soldados. Dado que lleva Ramah y que su alter ego es un supersoldado khawarij, Fornidson decidió hacer lo correcto y arriesgarse a tener enfrente un Fiday, representando que le estaba tocando las narices ya no solo a la industria biofarmacéutica haqqislamita, cosa en sí misma bastante poco recomendable, sino también a, por alguna, razón, la secta Hassassin.